Granada quiere posicionarse en el ámbito del derecho industrial
Los colegios granadinos de Titulados Mercantiles y Empresariales, de Abogados y el Consejo Andaluz de Colegios de Abogados han celebrado hoy la presentación del Congreso Andaluz de Derecho Industrial, que tendrá lugar en Granada el próximo mes de octubre.
Se trata de un Congreso, que luego se verá apoyado con otras actividades de la Escuela de Derecho Mercantil que, en palabras de Blas Alberto González, director académico del Congreso y juez de lo Mercantil de Granada, tiene entres sus objetivos, “convertir a Granada en uno de los focos fundamentales de discusión sobre el derecho industrial”, dada la dimensión económica y geográfica de Andalucía; “incentivar la formación de los profesionales en las especialidades de propiedad y competencia”, de forma que los profesionales andaluces tengan más oportunidades de adjudicarse los grandes procesos; y “crear un poso de discusión que lleve a la creación del Observatorio Andaluz de la Propiedad Industrial, con el apoyo de las administraciones, dado que esa parcela supone un factor productivo de importancia para la región”.
Por su parte, Miguel Romero, presidente del Comité de Dirección de la Escuela de Derecho Mercantil de Granada, apunta que “los profesionales del área económica, consideramos que el derecho industrial genera cada día más actividad”, que se recoge en dos grandes bloques. Por un lado, en el ámbito de la valoración de la marca, bien para una empresa o grupo, o bien para la transmisión de la misma. Y por otro, por las infracciones, especialmente de plagio, que se cometen en el campo de patentes y marcas.
La Escuela de Derecho Mercantil es consciente de esas circunstancias y de ahí que, “con posterioridad al congreso, organizará unas jornadas de formación que se centrará en los ámbitos jurídicos y económicos de esta materia”
La ponencia de presentación del Congreso ha estado a cargo de Alberto Casado Cerviño, director de la Oficina Española de Patentes y Marcas, quien se ha referido a la “excelente” estructura innovadora que posee Andalucía, a la actividad que desarrolla en el ámbito de la propiedad industrial y, más específicamente en el ámbito de la protección de las patentes, en donde cuenta con profesionales muy reconocidos y, sin embargo, el número de patentes que se registran es inferior a la media española. Un déficit que justifica este experto como consecuencia de “un débil sector industrial y una escasa internacionalización”, si bien salva algunos sectores como el biotecnológico. De hecho, la solicitud de patentes nacionales en 2010 de Andalucía fueron sólo 454, es decir, el 12,82% del total español.
Casado Cerviño se ha detenido especialmente en su conferencia “La patente comunitaria y los Tribunales de patentes comunitarios: estado de la cuestión”, en otro asunto que conoce de cerca, la situación actual de las negociaciones para la creación de una patente que cubra todo el territorio de la Unión Europea. Se trata de una negociación iniciada hace bastantes años pero que está ya en su fase final, con un punto conflictivo, cuál es el régimen lingüístico final que va a tener esa patente, dicho en otros términos, si el español va a estar o no dentro de los idiomas en los que se podrá solicitar, proteger y acudir a los tribunales en este ámbito. Por tanto, “se trata de un dosier enormemente sensible, por lo que implica económicamente, ya que, en primer lugar, las patentes son el mecanismo jurídico que protege la innovación, en segundo lugar porque el régimen de competitividad actual se centra en el modelo innovador y, tercero, porque nos jugamos la presencia de nuestro idioma en los mercados tecnológicos”, subraya el ponente, que es miembro de ese equipo negociador español.