Granada prepara el Congreso Andaluz de Derecho Industrial
Con buenas mimbres se hace un buen sombrajo, pero es preciso tejerlas con precisión para que debajo el sol no caliente. En el caso de Andalucía, las mimbres son los más de 18.000 investigadores que se reparten en diferentes grupos de investigación, muchos en el seno de las propias universidades de la Comunidad Autónoma; cifra a la que se suma un número difícil de calcular de investigadores que desarrollan su labor en la empresa privada. Y en una sociedad donde la gestión del conocimiento se alza como pilar de la mejora socioeconómica, esos recursos humanos son un valor en sí mismos. Sin embargo, no siempre los afectados saben gestionar los beneficios que les acarrean protecciones como las patentes, marcas, modelos de utilidad, etc. y cómo hacerlos valer frente a imitaciones u otro tipo de injerencias.
De ahí la iniciativa que se hará realidad los próximos días 6 y 7 de octubre, con la celebración del Congreso Andaluz de Derecho Industrial.
En palabras de Blas Alberto González, director académico del Congreso y juez de lo Mercantil de Granada, el encuentro tiene entre sus objetivos, “convertir a Granada en uno de los focos fundamentales de discusión sobre el derecho industrial”, dada la dimensión económica y geográfica de Andalucía; “incentivar la formación de los profesionales en las especialidades de propiedad y competencia”, de forma que los profesionales andaluces tengan más oportunidades de adjudicarse los grandes procesos; y “crear un poso de discusión que lleve a la creación del Observatorio Andaluz de la Propiedad Industrial, con el apoyo de las administraciones, ya que esa parcela supone un factor productivo de importancia para nuestra Comunidad”.
Por su parte, Miguel Romero, presidente del Comité de Dirección de la Escuela de Derecho Concursal y Mercantil de Granada, apunta que “los profesionales del área económica, consideramos que el derecho industrial
genera cada día más actividad”, que se recoge en dos grandes bloques. Por un lado, en el ámbito de la valoración de la marca, bien para una empresa o grupo, o bien para la transmisión de la misma. Y por otro, por las infracciones, especialmente de plagio, que se cometen en el campo de patentes y marcas.
La Escuela de Derecho Concursal y Mercantil es consciente de esas circunstancias y de ahí que, “con posterioridad al Congreso, organizará unas jornadas de formación que se centrará en los ámbitos jurídicos y económicos de esta materia”, añade Romero.
Con estas iniciativas se pretende que la malla que conforman los investigadores se trabe con los apoyos técnicos y jurídicos que precisa para que el sol no se filtre por rendijas indeseadas y, en consecuencia, se acreciente el volumen de solicitudes de propiedad industrial registradas en Andalucía durante el pasado año, que quedaron por debajo de lo que su peso poblacional representa en el conjunto de España. Así, según los datos de la Oficina Española de Patentes y Marcas, en la modalidad de patentes nacionales la región sumó 454, el 12,84% del total; en modelos de utilidad las 233 solicitudes representan una cuota del 9,28%; en diseños el 12,29%; en marcas el 11,44% y en nombres comerciales el 17,68%.
La organización del Congreso corresponde a los colegios granadinos de Titulados Mercantiles y Empresariales, de Abogados y de Economistas, junto a la Escuela de Derecho Concursal y Mercantil y el Consejo Andaluz de la Abogacía.